Portada del libro "La búsqueda del método natural"

Sinopsis del libro “La búsqueda del método natural”

Este es el libro número 95 de la colección La ciencia para todos, escrito por Jorge Llorente Bousquets, editado por el Fondo de Cultura Económica con ISBN 978-968-16-6628-6. A continuación un breve resumen del contenido.

Resumen

Este libro habla acerca de la clasificación de las especies animales, principalmente, aunque también se hacen menciones a las especies vegetales. Se habla acerca del porqué se clasifican las especies y de su importancia. Los primeros capítulos hablan acerca de cómo se clasificaban las sociedades antiguas, y de ahí comienza a describir, en los capítulos sucesivos, las nuevas formas de clasificación conforme se van teniendo nuevas herramientas y nuevos descubrimientos. Esta descripción termina con la forma actual de clasificación (actual a 1990, año de publicación original del libro), dejando en claro que aún hay camino por recorrer en esta tarea.

En el capítulo uno se relata como el hombre, ya sea en lo individual, o en lo grupal, ha tenido la necesidad de observar el universo en el que vive, y hallar las similitudes y las diferencias de todas las entidades con las que se encuentra, ya sean objetos inanimados, o seres vivos. Y de esta necesidad es que surgen las taxonomías, o clasificaciones. Sin embargo, el establecer una taxonomía no ha resultado una labor sencilla ya que no se puede acordar qué información debe contener, cuál es el criterio general para establecer una especie en una parte de la taxonomía, y porqué no en otra.

En el capítulo dos se describe, como ejemplos, la forma en que los mayas y los fore clasificaban las plantas y los animales. Este ejercicio tiene como propósito establecer una línea base de como las culturas antiguas realizaban esta tarea, y de ahí poder establecer una evolución en cuanto a esquemas de clasificación. Dentro de los descrito en el capítulo, se revisan algunos asuntos etimológicos para analizar los nombres asignados por estas culturas, además de revisar las características con las que diferenciaban a las especies. En la parte final del capítulo también se menciona la clasificación de los hongos por parte de los purépechas de la cuencia del pátzcuaro.

Para el capítulo tres se introducen a dos personajes relevantes en la actividad taxonómica, y los puntos de vista opuestos que tenían: Linneo (el padre de la taxonomía moderna) y Adanson. Y es en este capítulo donde se discuten sobre los métodos naturales y artificiales de clasificación. Un método natural de clasificación se refiere a “la construcción de un ordenamiento de seres vivos que compartiesen el máximo número de características o el hallazgo de las esencias como patrón para su ordenamiento; mientras que la producción de clasificaciones artificiales se fundaba en la elección de aquellos caracteres fáciles de observar, elegidos y ordenados de un modo arbitrario, cuyo propósito central era básicamente la identificación”.

En el capítulo cuatro, se habla de otros dos personajes relevantes para la taxonomía: Lamarck y Darwin. Por otro lado, el tema central del capítulo es el cómo considerar la teoría de la evolución en lo que respecta a la clasificación de las especies. Dentro de las aportaciones de Lamarck al área de la taxonomía, una de las principales fue el primer árbol filogenético de los seres vivos. Unos años más tarde, como aportación de Darwin, propuso que “la genealogía es esencial en la elaboración de clasificaciones naturales, pero no desarrolló un método riguroso y lógico para el descubrimiento de tales genealogías de organismos”.

La irrupción de nuevas tecnologías, y su aporte en la taxonomía biológica, es abordado en el capítulo cinco. Aquí es donde se comienza a hablar de una nueva taxonomía experimental, donde los microscopios y los estudios moleculares comienzan a tomar una gran relevancia ya que permiten hacer estudios a un nivel distinto de las simples observaciones anteriores. También se habla de Huxley como un personaje relevante para este momento histórico.

En el capítulo seis se habla de una nueva manera de abordar el problema de la clasificación de las especies. En esta ocasión se trata de las especies matemáticamente definidas y de los biólogos recolectores de vectores, matrices y ecuaciones. También es aquí donde se introducen a los “camináculos” y los “artigálculos”, un grupo de animales imaginarios que tenían como propósito ser examinados y determinar las relaciones evolutivas entre ellos “y obtener principios aplicables en la reconstrucción de la evolución de organismos reales, a través de las técnicas numéricas desarrolladas por los feneticistas”.

En el capítulo siete, ya más cercanos a nuestra realidad histórica alrededor de 1960 y posterior, se comienza a hablar de las propuestas de Henning, del nuevo concepto de “especie” propuesto por Wiley y las implicaciones lógicas de cambiar la forma histórica de ver a una especie.

Por último, en el capítulo ocho, se describen algunos de los lineamientos que se pudieran dar en el futuro en la investigación y desarrollo de la taxonomía biológica. Temas y conceptos como simbiosis, plásmidos y episomas, así como fenómenos inexplorados son expuestos en esta parte del libro para dejar al lector con una visión de la ciencia de frontera (para ese momento).

A manera de reflexión

El tema de este libro está muy alejado de los temas que yo domino. Por lo tanto, nunca me había puesto a pensar en que proponer un sistema de clasificación, una taxonomía, pudiera ser tan complicado, y que la propuesta que sea va a traer nuevos problemas asociados. Ya sea porque no se ajusta a los modelos anteriores, o porque sería muy complicado su análisis, o porque simplemente se tiene mucha incertidumbre con la información que se utiliza.

Sin embargo, a pesar de mis desconocimiento en el área, el libro me pareció interesante, y creo que cumple cabalmente con su función de ser divulgación científica, ya que expone temas complejos de una manera digerible para alguien no experto en el área. Y cuando uno termina de leerlo se tiene la sensación de que se aprendió algo nuevo, y se tiene más respeto por los científicos del área en cuestión.

Es un libro recomendable para aquellos que disfrutan la ciencia en general.

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